Musée historique

Kaysersberg Vignoble

Este museo, una de las joyas de la hermosa ciudad medieval de Kaysersberg, está situado en la primera planta de una casa patriciana construida en 1521 por Reinhard Wide. Los herederos de Aimé Maire han cedido esta residencia a la ciudad de Kaysersberg que aseguró su restauración en 1972. A lo largo de las salas se descubren obras de arte religioso de una riqueza innegable (Virgen que se abre de 1380, Cristo de ramos del siglo XV), esculturas de apóstoles y de santos de la capilla Saint-Wolfgang y del convento de los Récollets, obras de los Rothbletz, escultores en Kaysersberg en el sigo XVIII. El museo encierra también los descubrimientos arqueológicos regionales, desde la Prehistoria hasta la época romana así como objetos de arte profano y curiosidades varias: notable estufa de ladrillo azul de Delft, tacas de chimenea, mobiliario regional, armas y hasta las gordas almadreñas del penitente. Documentos sobre hombres célebres de Kaysersberg, Jean Geiler, Mathias Zell y muchos otros completan esta evocación del pasado de la ciudad.

Este museo, una de las joyas de la hermosa ciudad medieval de Kaysersberg, está situado en la primera planta de una casa patriciana construida en 1521 por Reinhard Wide. Los herederos de Aimé Maire han cedido esta residencia a la ciudad de Kaysersberg que aseguró su restauración en 1972. A lo largo de las salas se descubren obras de arte religioso de una riqueza innegable (Virgen que se abre de 1380, Cristo de ramos del siglo XV), esculturas de apóstoles y de santos de la capilla Saint-Wolfgang y del convento de los Récollets, obras de los Rothbletz, escultores en Kaysersberg en el sigo XVIII. El museo encierra también los descubrimientos arqueológicos regionales, desde la Prehistoria hasta la época romana así como objetos de arte profano y curiosidades varias: notable estufa de ladrillo azul de Delft, tacas de chimenea, mobiliario regional, armas y hasta las gordas almadreñas del penitente. Documentos sobre hombres célebres de Kaysersberg, Jean Geiler, Mathias Zell y muchos otros completan esta evocación del pasado de la ciudad.